Travesía Bariloche 2003 Parte-10

Viaje Bariloche - San Antonio Oeste

Después del desperfecto en la 9073, continuamos rumbo a San Antonio Oeste, pero con una particularidad. La GT22CW 9070 que estaba trabajando como locomotora auxiliar, no estaba a la cabeza junto a la 9073 sino a la cola del tren. en resumen, la formación estaba compuesta de la siguiente manera:

9073 + Bandejas y coches + 9070

Lo extraño es que ambas locomotoras fraccionaban a la vez coordinando sus movimientos por radio entre ambas unidades. Algo que la verdad era digno de ser visto y oído, ya que mi coche era él ultimo de la formación.

De aquí en mas la noche se apoderaría del viaje. Pasaron estaciones como Clemente Onelli, Ingeniero Jacobacci, etc., hasta llegar a San Antonio Oeste al día siguiente. Aprovecho para comentarles que Al igual que Carmen de Patagones, SAO es punta de rieles, ya que para ingresar a la misma hay que pasar por el Empalme Dr. Cortizo que un triangulo que nos permite ingresar o salir de esta en cualquier dirección ya sea hacia Viedma o Bariloche. En el medio del triangulo se encuentra un cargadero de sal que actualmente es utilizado para cargar las tolvas del "Tren Salero" que en forma conjunta operan SE.FE.PA. y Ferrosur Roca hacia Bs.As, pudiéndose verlos en la playa de clasificación de Kilo 5 en Gerli cerca de la estación Avellaneda del FC Roca

La llegada a San Antonio Oeste

Luego de un buen descanso, con las primeras luces, pude llegar al  empalme Dr. Cortizo, lo que me indicaba que en un rato estaría en mi destino. Nunca comente el propósito de mi visita a San Antonio Oeste. Lo que ocurre es que en esta ciudad se encuentra el taller principal de SE.FE.PA., donde se efectúan las reparaciones de todo el material de la empresa. La ciudad es un típico barrio ferroviario. Incluso si uno camina por la costa puede encontrarse con rieles, vagones, en la calle hay varios postes de teléfono de los que utilizaba el FFCC, carteles de aviso del FC Gral. Roca, etc. La entrada a SAO es un poco lenta debido a la gran cantidad de pasos a nivel que se encuentran a lo largo del camino a la estación.  Una vez arribados a la estación, La 9070 llevó a su hermana, la 9073, al galpón de locomotoras para que le reparen el motor de tracción con problemas, mientras que la otra se encargaba de las maniobras con las bandejas automovileras y demás.

En esta estación el tren se detiene por un buen rato, ya que no es solo invertir la posición de la locomotora sino que también hay mucho movimiento con bandejas automovileras, ya sea para cargarlas o descargarlas, hay también movimiento de vagones de cargas y a veces de coches vacíos que van hacia el taller. 

También acá es donde se realiza uno de los recambios de conductores, ya que el otro es en Ing. Jacobacci, que es donde suben los experimentados conductores de montaña.

Las 3 dotaciones de conductores quedan así:

·         Viedma - San Antonio Oeste

·         San Antonio Oeste - Ing. Jacobacci

·         Ing. Jacobacci - Bariloche

Una vez finalizadas las maniobra el tren partió rápidamente hacia Viedma, donde por la tarde volvería e emprender viaje hacia Bariloche. Después de ver la partida me dirigí hacia un hotel, donde en vez de pasar la noche pasaría el día. Lo que pasaba es que yo tenia pasaje de colectivo con la empresa Andesmar y esta me pasaría a buscar por SAO a las 12 de la noche. Entonces busque un hotel para oficializar como base, para dejar los bolsos y demás. Por suerte este estaba a pocas cuadras de la estación por lo que no habría dificultades en llegar. El problema es que me acorde tarde de que necesitaba algo donde poder anotar para hacer el relevamiento de los coches que se encontraban en el predio del taller. Y no eran pocos. Así que salí en busca de una librería en donde poder comprar una pequeñas libreta o anotador. Después de dar varias vueltas me encontré con un pequeño kiosco que por suerte tenia unos pequeños anotadores anillados y por supuesto para no tener problemas compre un par de biromes. De aquí me fui al hotel a buscar la cámara y de ahí a un bar ubicado en la esquina del hotel para poder desayunar. Esta bien que sea aficionado a los trenes y demás, pero tampoco la pavada. Panza llena, corazón contento. A eso de las 10:30 de la mañana me dirigí a la estación a consultar con quien tendría que hablar para poder ingresar al taller, y me comentan que hable directamente en seguridad, así que ahí fui. Lo único que me imaginaba es esa situación burocrática que dice: Uhhh...Lo que pasa es que no tiene un permiso especial firmado por el presidente, Nooooooooo...sacar fotos esta prohibido, Por favor váyase de acá que hay secretos de estado, etc. 

Pero por suerte eso no pasó.

CONTINUA...en parte 11

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