Llegamos a Rivera a tiempo para que Fabián fotografiase el edificio de la estación, pero para recorrer el cuadro ya no hubo tiempo. Nos instalamos en el Hotel Rivera, que fue totalmente remodelado hace poco tiempo. Era la segunda vez que me quedaba acá, y esta vez como la anterior tuve la sensación de que era el único huésped. Nos buscamos la cena en la rotisería La Estación (nombre muy apropiado) y cenamos en el comedor del hotel. Es una práctica que también la viví en el hotel de Puán: como el hotel no da cena ni almuerzo, el huésped se busca el morfi y puede comer en el hotel, que también le da los cubiertos; además, puede adquirir la bebida en el hotel.

El día siguiente, lunes 24 de enero, amaneció como los días anteriores, muy lindo, pero hacía cada vez más calor. Salimos de Rivera después de un desayuno tempranero. Nuestro plan era bajar por la vía del BByNO (construida bajo la administración del BAP) hasta Darregueira. Una foto rápida a la estación Rivera lado calle, que les adjunto, para después cruzar la vía a Darregueira y tomar un camino ancho que, luego de trasponer la vía a Rolón, comenzó a alejarse de la vía principal del BByNO.

Eso era raro... Al cabo de unos pocos kilómetros, el camino terminó por transformarse en un sendero verde y angosto... ¡nos habíamos perdido! Dimos marcha atrás y volvimos a Rivera; en el camino nos confirmaron que efectivamente habíamos errado el camino. ¡Y era tan fácil! Era cuestión de no cruzar la vía, ya que el camino va pegado a la misma...